Conocida popularmente como estrelicia blanca, se trata de una planta que pertenece a la familia de las Musáceas y al género de las aves del paraíso, que son plantas tropicales con unas flores muy llamativas, tanto por su aspecto como por su aroma y el dulzor de su néctar. Estas plantas se abren en forma de abanico y adoptan una apariencia muy similar a las aves tropical.
Cuidados básicos:
- Ubicación: se suele utilizar para formar pequeños grupos pero también de forma aislada para decorar cualquier espacio. También se puede cultivar en macetas en terrazas o patios, necesitando siempre estar en una zona en la que reciba el sol de forma directa o al menos con una muy buena iluminación.
- Temperatura: lo ideal es que sea templada y que nunca se exponga a las heladas ya que no las toleraría.
- Suelo: el perfecto para esta planta es el que lleve una mezcla de tierra de jardín con turba, estiércol, arena y mantillo de hojas.
- Trasplante: si la tienes en maceta puedes trasplantarla cada 3 años, siempre en primavera.
- Riego: tiene que ser abundante y frecuente, aunque siempre esperando a que se seque la superficie entre cada riego, manteniendo la tierra algo de humedad en todo momento.
- Abono: aplica un fertilizante mineral orgánico cuando pongas el abono anual de jardín.
- Poda: no la necesita pero sí es bueno hacerla para eliminar las hojas viejas o estropeadas.
- Plagas y enfermedades: es muy resistente en este sentido, así que a no ser que descuides mucho lo básico.
- Multiplicación: la mejor opción es hacerla a partir de los brotes que se producen en la base y que pondrás a enraizar como esquejes.